Juvenile-onset systemic lupus erythematosus (jSLE) is an autoimmune disease that presents with greater severity and higher mobility than adult-onset SLE. In Latin America, data on its incidence, prevalence and clinical phenotypes are limited. Specialized care is available only in a few centers with trained pediatric rheumatologists leading to substantial diagnostic delays and barriers to timely treatment. This review highlights the urgent need for region-specific strategies to improve early diagnosis, expand access to specialized care and reduce disparities in outcomes for children and adolescents with jSLE in Latin America.
El lupus eritematoso sistémico de inicio juvenil (jLES) es una enfermedad autoinmune que se presenta con gran severidad y alta mortalidad en comparación con el lupus eritematoso sistémico del adulto. En América Latina, los datos sobre la incidencia, la prevalencia y los diferentes fenotipos son limitados. La atención especializada está únicamente disponible en pocos centros que cuentan con reumatólogos pediatras capacitados para atender la complejidad de esta enfermedad, esto conlleva a un retraso importante, tanto en el diagnóstico, como en el inicio del tratamiento oportuno. Esta revisión destaca la necesidad urgente de implementar estrategias específicas para la región que ayuden a mejorar el diagnóstico temprano, amplíen el acceso a la atención especializada y reduzcan las disparidades en los desenlaces de los niños y los adolescentes con jLES en América Latina.